Page 20 - RETIC_ MAR_2020_Vol_3_1
P. 20
Revista de ecocardiografía
práctica y otras técnicas de imagen cardíaca
Figura 4. Sección longitudinal del ventrículo izquierdo. Se observa los segmentos
descendente y ascendente adosados. El círculo señala la parte terminal del
segmento ascendente, que discurre aislado para amarrarse al fulcro cardíaco. Figura 7. Técnica de hematoxilina y eosina a menor aumento (10x).
Este área se activa en la fase de succión cardíaca. En la histología se muestra Trabécula ósea madura que configura el tejido del fulcro cardíaco (corazón
la diferente orientación de las fibras longitudinales (segmento ascendente, bovino)
SA) en relación al descendente (fibras transversales, SD) (corazón de bóvido)
La banda miocárdica no puede estar anatómicamente suspendida y libre en la
cavidad torácica, dado que le sería imposible eyectar la sangre del corazón a una
velocidad de 300 cm/s. Debía haber un sitio de amarre que, hallado, se deno-
mina “fulcro cardíaco” (punto de apoyo de la palanca) (Figura 5 a Figura 10).
(7)
Figura 8. Fulcro cardíaco en un corazón humano de diez años de edad
(explante)
Figura 5. Fotografía aclaratoria de los haces musculares del segmento
derecho que forma el ventrículo derecho que emergen del fulcro cardíaco
(AP: arteria pulmonar; A: aorta; VT: válvula tricúspide) (corte transversal de
un corazón bovino)
Figura 6. Se observa el fulcro cardíaco en tomografía computarizada Figura 9. Fulcro cardíaco en corazón de embrión humano (23 semanas de
(corazón bovino). Al pie se muestra el fulcro resecado gestación) (A: aorta; AP: arteria pulmonar; VT: válvula tricúspide)
• Artículos de revisión 16 RETIC. 2020 (Mar); 3 (1): 14-18